Commodities no tan Commodities

Vamos a jugar con algunos mitos. Los commodities no son productos 100% homogéneos, totalmente iguales. Se entiende que al ser productos de, al menos, similares características, con determinados aspectos de calidad, sanidad en algunos casos, etc., uno puede comprar con “los ojos cerrados” sin importar el vendedor ya que el producto será igual al que vende otro operador. Esto ocurre para una muy buena cantidad de productos: el oro, plata, soja, maíz, trigo, girasol, aceites, pellets, etc etc etc.

La pregunta relevante es si realmente el mercado no distingue “specialties” dentro de las commodities. La respuesta, para complicarle la existencia a muchos, es que efectivamente existen productos diferenciales en estos commodities que permiten pagar primas (o descuentos) en el precio reflejado en las pizarras de todo el mundo.

"El girasol es el girasol", pero existe el alto y mid oleico. Aca no vale la pena analizar el mercado porque podemos considerar estos dos productos como diferenciales en sí mismo.

Lo mismo sucede en el maíz por ejemplo, con el MAV o los trigos de calidad superior.

Pero, en otros casos, existe diferenciación aún al no considerar variedades especiales. Y este es el caso de la bendita soja.

Por ejemplo, los clientes prefieren la soja de color claro para la producción de harinas: al ser más blanca se vende más fácil. La soja más oscura se refleja en la harina y ya no resulta tan atractiva.

Se puede construir un ranking de calidad de soja aproximado:

1º) Brasil
2ª) Golfo US.
3º) Puertos del oeste de US.
4º) Argentina

La calidad brasilera es naturalmente mejor que la argentina. Es una clara ventaja comparativa. Si los semilleros argentinos intentaran igualar dicha calidad, existirá un costo que se llevará al precio de la semilla para siembra, con lo que nuestros productores deberían pagar por tener un producto igual al de Brasil.

Los porcentajes de aceite y harina son diferentes en las diferentes latitudes y ello, en parte, explica ese ranking aproximado que les mostré.

Existe otra variable interesante: ¿Cómo se traslada la cosecha?. En Estados Unidos es mayormente de manera fluvial. Entonces se cargan las barcazas, generalmente con la soja de una misma zona y ello ocasiona que su producto sea homogéneo dentro del barco que zarpe hacia tierras lejanas….

En Argentina se realiza vía camión. Los mismos llegan desde todas las zonas productoras a puerto, previo pase por algún acopiador que mezcla los granos de todos sus clientes, para terminar de mezclarse en puerto con soja del norte, del centro de Córdoba, del sur de Buenos Aires, etc. Esto termina provocando que la soja que el barco llevará a China o la UE será muy heterogénea en sí misma.

Esta diferencia, en este caso dado por el tipo de trasnporte, se paga, todo tiene precio en el mundo. Y si ustedes creen que algo no lo tiene es porque hacen falta buenos financistas...

Mucho no se habla de estos temas. Pero si conocen a alguien que trabaje para una exportadora se los puede afirmar.

Entonces, a clientes sofisticados no les da lo mismo desde donde importen la oleaginosa. Como se darán cuenta, no es siempre función directa del precio la orden de compra de commodities. Ya, al menos, conocemos que existen otras variables en juego.

En fin, un poco de luz sobre el tema…