Estoy con Cristina, los medios dicen cualquier cosa.

Habrán leído en diarios que el pasado 4 de noviembre cayó una fuerte helada perjudicando el desarrollo de los cultivos. Afectó a la soja y al maíz, pero el gran perjudicado fue el trigo. Estimar cuánto caerían los rendimientos y, con ellos, la producción final de la campaña se transformó desde entonces en el deporte favorito de todo el mundo, especialmente de los periodistas que tenían que poner el dato. Los que verdaderamente saben del tema fueron muy cautos, tan cautos que no se animaban a ofrecer un solo número porque aún es temprano para poder cuantificar la pérdida de manera seria. Pero la insistencia de los periodistas y el ego de salir primero en los medios, hizo que algunos “especialistas” comenzaran a ofrecer sus datos preliminares. Y así se abrió el juego. 1 millón de toneladas menos, decían algunos. Nooo, respondían otros, no menos de 3 millones de pérdidas. Otros llegaron a decir 4 millones de merma, mientras que la mayoría se iba ubicando entre 1 y 3 millones. La diferencia es mucha, la incertidumbre también, por lo que, como ya comenté, el Gobierno cerró el registro de exportación.

Este ir y venir quedó evidenciado en su máxima expresión hoy. Hago un breve relevamiento de medios:

La Nación titula que se habrían perdido dos millones de toneladas. Pero luego aclara que serían entre 1,5 y 2 millones. Párrafo seguido comenta que la Bolsa de Cereales estimó las pérdidas en 1,2 millones, y ya van 3 datos con uno de ellos -el de la Bolsa- fuera del rango del primer párrafo. Lo simpático de ello es que la nota se centra en el informe de la Bolsa cuando en su título y primer párrafo desestimó su dato por completo.




Ámbito Financiero (con clave) estima la caída en 1,5 millones de toneladas, pero en el mismo párrafo usa sólo usa una fuente, el relevamiento de la Bolsa, que ya sabemos que estimó en 1,2. “Sólo en trigo se habrían perdido 1,5 millón de toneladas de grano que estaban próximos a cosechar. Un relevamiento conocido ayer y realizado por la Bolsa de Cereales de Buenos Aires sólo calcula el nivel de afectación de las heladas durante la primera quincena de noviembre y reporta 1,2 millón de toneladas.” Lo llamativo en ámbito es que ese 1,5 (que vaya saber de donde lo sacaron) las restaron de la producción estimada de 15 concluyendo que solo se obtendrían 13,5 millones de toneladas. Grosero error cometieron ya que los 15 (que en realidad son 15,2) ya contemplan las pérdidas por lo que la producción potencial sobre la cual se restó estaba bien por encima de los 16 millones.

El Cronista (con clave) también hizo de las suyas. Dice que: “Analistas y operadores prevén que las pérdidas en la producción del trigo 2007/08 no bajarán de las 3 millones de toneladas” para luego asegurar que: “Por su parte, la Bolsa de Cereales de Buenos Aires minimizó el impacto de las heladas sobre los plantíos de trigo. En ese marco, la entidad consideró que, de manera preliminar, rondará las 1,2 millones de toneladas, la mitad de lo que prevén varias de las consultoras de cabecera del sector.” Es decir, toman partido por el número más alto. Impacto, que le dicen.

Clarín estuvo calmo. Al menos en su edición de hoy.