Encuestas, proyecciones económicas y la teoría de la ducha
>Misiones no tendrá reelección indefinida. Lo curioso fue que al menos yo no leí ninguna encuesta que reflejara tal resultado, menos aún con una diferencia a favor de la oposición por 13 puntos.
Hoy temprano, el periodista Joaquín Morales Solá comentaba lo sucedido en Misiones y me llamó la atención cuando dijo que los encuestadores oficiales siempre tienen dos resultados de sus encuestas:
(a) la versión que va a los medios, generalmente oficialista, que tergirvesa números a favor del dato que favorece el Gobierno intentado manejar expectativas y el humor social;
(b) la versión con datos verdaderos a la que solo accede Balcarce 50 para que pueda realizar una lectura de la realidad acorde a, justamente, la realidad.
Lo primero que uno piensa es que la reputación de estos encuestadores debe verse lastimada de manera relevante luego de tamaño error. Más aún, y suponiendo que Morales Solá tiene razón, la credibilidad de los mismos debería tender a cero luego de conocerse que falsean datos para modificar expectativas de la población.
Evidentemente ello no ocurre o al menos no sucede con la intensidad que sería esperable. Elección tras elección siguen los mismos encuestadores paseando sus datos por los medios.
Por otro lado, otros critican los escenarios que hacemos los economistas. Es frecuente escuchar que si existiera el veraz de los economistas casi ninguno podría seguir viviendo de las consultorías, al menos en Argentina. Vasta mirar el REM del Banco Central y notar como, por ejemplo, sistemáticamente se ha subestimado el crecimiento del producto.
>A nuestro rescate viene Enrique Szewach, quien se autoproclama el descubridor de la "teoría de la ducha". Según la misma, muchos nos metemos debajo de la ducha cuando aún no terminamos de regular la temperatura del agua. Como ignoramos la velocidad de reacción exacta entre el movimiento de las canillas y la temperatura final del agua nos pasamos entre el "congelamiento y el instituto del quemado" hasta que encontramos la temperatura ideal y finalmente nos bañamos.
En economía, muchas veces se sabe que ciertos procesos van a pasar, pero se ignoran las velocidades de reacción. Eso sin considerar, sigue Szewach, que las restantes variables se pueden modificar en el camino (nuevas políticas económicas, nuevas leyes, resoluciones, precios internacionales, etc, etc, etc), lo que alteraría aún más las proyecciones inciales realizadas en determinado momento de tiempo bajo determinadas circunstancias.
¿Qué quiero decir con ello? Una cosa es fallar en determinada proyección debido a que las condiciones iniciales con las cuales se construyó el estudio han sido modificadas, o bien porque la velocidad de ocurrencia de determinado evento fue diferente a la estimada, y otra muy distinta es mentir deliberadamente como probablemente han hecho algunos encuestadores.
No quiero decir que muchos economistas no tengan intereses creados con determinados sectores y presenten comportamientos asemejables en determinadas circunstancias, pero sí quiero dejar clara la diferencia entre los dos tipos de errores.
Etiquetas: encuestas, expectativas, rem
¡Me encantó la teoría de la ducha! Me parece súper-aplicable a la política fiscal, que se decide en un momento pero tiene efecto mucho tiempo después, cuando las condiciones en las que se había tomado la decisión ya quizás no existan más o a cualquier decisión que tenga que tomarse para afectar el ciclo económico que se base en estimaciones del PIB que seguro después van a ser revisadas para arriba o para abajo.
¡Darle a eso el nombre de "teoría de la ducha", qué bueno!
Que los encuestadores tiren dos números los defenestra para siempre, sin duda.
Pero además: Uno suponía, mas o menos ingenuamente, que ciertos encuestadores trabajaban para los multimedios - que pueden pagarlos - y les pasaban a los noticieros datos honestos. Hete aquí que este supuesto parece falso, quizás porque algunos multimedios también estan englobados en el aparato de propaganda oficial.
Ayer escuchaba dos noticieros zapping mediante: TN - que yo suponía independiente - y que a las 21 o 22 horas aún acompañaba la tesis oficial de que ganaba Rovira y el aporreado Crónica, que que en ese mismo momento mostraba a los opositores saltando de contentos en Posadas y a un periodista suyo dentro del centro de cómputos leyendo una pantalla con casi todas las mesas escrutadas y un resultado como del 15 % a favor del opositor ( mas o menos lo que terminó siendo el cómputo final).
Con todo respeto, ulschimidt, pero, cómo podés haber considerado en algún momento que TN pudo haber sido un medio “independiente”?
TN es del Grupo Clarín, y si algo no es Clarín es ser independiente.
Su trayectoria reciente como multimedio dan prueba acabada que apoya al gobierno de turno según le convenga. Acordate de su defensa aliancista (que motivó que los pseudoprogres clasemedieros putearan a Clarín en sus pintorescas caceroladas), de su apoyo a ciertas medidas duhaldistas que le vinieron muy bien, de su presión para sacar esa ley ad hoc que les tramitó el senador Alfonsín, de su neoprogresismo kirchnerista a cambio de mantener una buena tajada de la publicidad oficial y de que no lo jodan con ciertos negocios (como la absorción de Cablevisión por su empresa Multicanal), y un largo etcétera.
Más allá de ser un diario lleno de noticias irrelevantes, mediocremente escrito, superabundante en publicidad, con cada página vendida al mejor postor, con una severa confusión entre análisis e infografías, además de todo esto, Clarín (el Grupo expresado hasta la exasperación por su medio gráfico principal -los otros, los menores, son Página/12 y La Razón-) fue y es un mass media oficialista, al menos, hasta que le convenga.
Cuando sea el momento, se dará vuelta.
Y, estimado Abuelo, los consultores top, efectivamente hacen eso: una versión hard y otra soft.
Hoy por hoy las grandes firmas de opinión pública y encuestas trabajan para el gobierno. En el site del Turco Asís hay una interesante parodia al respecto, que vale la pena leer cada tanto.
Como free lance laburo para algunas de esas top cada tanto, y sí, sus trabajos son peripatéticos…
En realidad, ellas -las firmas consultoras- son la comparsa que sigue el ritmo que señala el monje negro del tema: Albistur, quien con el Alberto (Fernández) marca la agenda que deben seguir esas consultoras en sus “resultados”.
Un botón de muestra: Equis, la del simpático obsecuente Artemio López, el jueves daba un resultado abrumadoramente favorable para Rovira, aportando Artemio un sesudo análisis, donde se sorprendía (o decía sorprenderse) de que pese a las denuncias de clientelismo que se difundían, Rovira arrasaría en las urnas…
Es lo que hay.
Saludos
Marcelo, muy informado y muy interesante. Gracias. Aunque a veces da pena conocer la realidad cuando se presenta cruda.
No es ingenuidad pero a veces a uno lo superan.
Interesante teoría coincido con Ana c.
No sé nada de cómo funcionan las encuestadoras allá y la verdad me sorprende un poco eso de que falseen los resultados que difunden públicamente (uno pensaría que la perdida de credibilidad anularía cualquier beneficio, no?). En todo caso, cuento que aquí en Uruguay, en general las encuestadoras tienen buena fama y le pegan bastante, EXCEPTO en los plebiscitos sobre reformas constitucionales o cosas así. La explicación que dan es que a fuerza de analizarlas una y otra vez, ya tienen bastante manyado cómo son las cosas en una elección nacional; qué votan los "indecisos", cómo opera la imagen favorable o desfavorable, cúales son los muestreos representativos, etc. En cambio en los plebiscitos, empiezan de cero. Como son infrecuentes y por motivos muy distintos, hay mucho menos experiencia acumulada sobre el tema y los resultados son más imprecisos.
"B", amigo Abuelo ("Vasta mirar el REM")
Duelen mis ojos, amigo FT. Cómo se puede ser tan pero tan vruto?